¿Cómo limpiar los diferentes tipos de suelo?

Limpiar el suelo puede parecer una tarea sencilla pero, para garantizar que se mantenga en perfecto estado durante el mayor tiempo posible, las rutinas de cuidado deben ser las adecuadas, tanto en lo que respecta a los utensilios de limpieza como a los productos empleados. Guía definitiva para limpiar los diferentes tipos de suelo.

¿Cómo limpiar un suelo según su superficie?

El primer paso es identificar el tipo de superficie a tratar. Los materiales más habituales en los suelos son la madera, la cerámica, el vinilo o PVC, el cemento pulido, el mármol y la piedra natural.

En algunos hogares o espacios, además, puede que haya varios tipos de suelo en distintas estancias, por lo que la limpieza se deberá ajustar a las características de cada zona.

Diferentes tipos de superficie

Madera

Los suelos de madera son muy populares por su calidez y estilo, pero el parqué también requiere un cuidado especial que prevenga el deterioro de su aspecto y evite las tan temidas rayas.

Lo más recomendable es barrer con escobas de fibras suaves o aspirar, y después fregar empleando mopas para suelo.

En cuanto a los productos de limpieza más apropiados, se puede utilizar agua tibia en la mopa, con un limpiador específico para madera, siempre evitando el exceso de agua.

También es recomendable aplicar periódicamente un abrillantador o producto específico para proteger la madera.

Cerámico

Los suelos cerámicos son resistentes y fáciles de mantener. Para su limpieza, se puede pasar la escoba o aspirar como paso inicial y, posteriormente, empleando fregonas para suelos con agua tibia y detergente suave, retirar los restos de polvo y suciedad incrustada.

Periódicamente, en la limpieza profunda, es importante limpiar las juntas de los azulejos con un cepillo, utilizando una solución de agua y bicarbonato para retirar la suciedad acumulada.

Vinílico o PVC

Los suelos de vinilo o pisos laminados de PVC son prácticos y resistentes. No obstante, para mantenerlos en buen estado y evitar el desgaste, es importante seguir una rutina de limpieza específica, que comienza barriendo o aspirando y continúa con el fregado, por lo general con una mopa para evitar el exceso de humedad.

También se puede emplear la fregona, siempre y cuando sus fibras sean adecuadas y los cubos para fregonas permitan un adecuado escurrido.

Con este tipo de materiales es esencial evitar el uso de productos de limpieza abrasivos, que pueden dañar el acabado.

Mármol

El mármol es un material muy elegante, pero es importante darle el mantenimiento adecuado para evitar las manchas o la pérdida de brillo.

El polvo y la arena pueden rayar el mármol, así que usa una escoba de cerdas suaves o una aspiradora con un cepillo especial.

Utiliza una fregona de microfibra que minimice las marcas y evita cualquier producto de limpieza ácido, que podría resultar corrosivo y deteriorar el mármol.

Periódicamente, es recomendable pulir este tipo de suelo para renovar su protección y su brillo.

Piedra natural

Los suelos de piedra natural, como el granito o la pizarra, son muy resistentes, pero también requieren un mantenimiento del hogar adecuado para que conserven su aspecto original.

Es importante mantener una limpieza frecuente y retirar el polvo barriendo o aspirando para evitar que raye la superficie.

En cuanto al fregado, emplea una fregona suave, agua tibia y un limpiador de pH neutro y evita los productos ácidos.

De vez en cuando, es recomendable aplicar un sellador para proteger la piedra de manchas y desgaste.

Cemento pulido

Este tipo de suelo es moderno y duradero, pero al igual que otros materiales, necesita cuidados específicos para evitar su deterioro.

En primer lugar, usa escobas de cerdas suaves para quitar el polvo o una aspiradora.

Para fregar, mezcla agua tibia con detergente neutro y limpia con una fregona de microfibras humedecida, escurriendo bien en el cubo antes de dar las pasadas. Evita el uso de utensilios de limpieza abrasivos que puedan arañar el acabado del cemento.

Aplica un sellador especial para cemento una vez al año para mantener su protección y evitar manchas.

Consejos para mantener suelos delicados en perfecto estado

Independientemente del tipo de suelo que tengas en tu hogar, algunos consejos generales te ayudarán a mantenerlos en perfecto estado durante más tiempo.

Frecuencia ideal de limpieza según el tipo de suelo

Los materiales que se pueden rayar por el polvo o las partículas de arena, como el mármol, la madera o la piedra natural, requieren un barrido o aspirado muy frecuente, idealmente diario.

La cerámica, el suelo de vinilo o de PVC y el cemento pulido admiten algo más de espaciado en el barrido o aspirado, que puede ser dos o tres veces por semana.

En lo que respecta a las rutinas de fregado, por lo general, ya sea con mopas o con fregonas, la frecuencia semanal suele ser adecuada.

Siguiendo estas pautas podrás dejar tu hogar impecable, disfrutando de suelos limpios y en perfecto estado durante mucho tiempo.